La región de Emilia-Romaña, en el note de Italia, ofrece aventuras para todos los gustos. Explore la antigua ciudad de Rávena, más conocida por los interminables mosaicos bizantinos que adornan sus iglesias y monumentos. Además, cuenta con una poderosa colección de ocho sitios de la UNESCO. O aventúrese en la cercana Bolonia para recorrer sus calles porticadas repletas de reliquias medievales, por no hablar de la cocina más deliciosa de Italia. En esta parte de Italia se puede hacer un poco de todo. Desde tomar el sol en las playas de Punta Marina hasta acelerar los motores en el Museo Lamborghini, pasando por el arte moderno de vanguardia en el MAMbo o por una lección de cocina boloñesa.

Al emperador Romano Diocleciano le gusto tanto la zona que en el año 295 D.C., ordenó construir un palacio para su jubilación. No se le puede culpar. Es uno de los lugares más soleados de Europa, con un paisaje sin igual.

El lugar de nacimiento de la democracia y la civilización occidental, la joya de la corona, la Acrópolis, en lo alto de la meseta bajo un cielo azul bruñido. Sus mejores recuerdos pueden provenir de perderse en las calles serpenteantes del antiguo barrio de Plaka.

Un lugar de belleza casi mitológico. Después de anclar, ascienda los 895metros a la capital Fira – accesible en burro, teleférico, o un vuelo de 600 escalones! Vea el símbolo de Santorini, la Iglesia Agíou Mina con su característico campanario de cúpula azul.

De un paso atrás en el tiempo en este «tesoro patrimonio mundial» de la UNESCO este en un lugar de calles de mármol antiguo, llena de palacios de piedra. Debe hacer un paseo por las murallas de la ciudad, deteniéndose en las torres de vigilancia a lo largo del camino para tomar fantásticas fotos.

La región de Emilia-Romaña, en el note de Italia, ofrece aventuras para todos los gustos. Explore la antigua ciudad de Rávena, más conocida por los interminables mosaicos bizantinos que adornan sus iglesias y monumentos. Además, cuenta con una poderosa colección de ocho sitios de la UNESCO. O aventúrese en la cercana Bolonia para recorrer sus calles porticadas repletas de reliquias medievales, por no hablar de la cocina más deliciosa de Italia. En esta parte de Italia se puede hacer un poco de todo. Desde tomar el sol en las playas de Punta Marina hasta acelerar los motores en el Museo Lamborghini, pasando por el arte moderno de vanguardia en el MAMbo o por una lección de cocina boloñesa.